Muere lentamente quien no viaja,
quien no lee,
quien no oye música,
quien no encuentra gracia en sí mismo.
Muere lentamente
quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.
Muere lentamente
quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos
trayectos,
quien no cambia de marca,
no se atreve a cambiar el color de su
vestimenta
o bien no conversa con quien no
conoce.
Muere lentamente
quien evita una pasión y su remolino
de emociones,
justamente estas que regresan el brillo
a los ojos y restauran los corazones
destrozados.
Muere lentamente
quien no gira el volante cuando esta infeliz
con su trabajo, o su amor,
quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir
detrás de un sueño
quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida,
huir de los consejos sensatos…
¡Vive hoy!
¡Arriesga hoy!
¡Hazlo hoy!
¡No te dejes morir lentamente!
¡NO TE IMPIDAS SER FELIZ!
Pablo Neruda.
un error garrafal teorizar antes de tener datos.
Sin darse cuenta, uno comienza a forzar los hechos para que encajen en
las teorías, en lugar de ser las teorías las que se encajen en los hechos.”
Sherlock Holmes
—No era nadie. El agua.
—¿Nadie? ¿Que no es nadie el agua?
—No hay nadie. Es la flor.
—¿No hay nadie?
Pero ¿no es nadie la flor?
No es nadie. Era el viento.
—¿Nadie? ¿No es el viento nadie?
—No hay nadie. Ilusión.
—¿No hay nadie?
¿Y no es nadie la ilusión?